El ukiyo-e

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El ukiyo-e

Se llama ukiyo-e a los grabados que se realizaron en Japón a partir del siglo XVII. El ukiyo-e como género es una de las manifestaciones artísticas más importantes y que más ha trascendido las fronteras y el tiempo. Por su parte, el ukiyo-e se nos presenta como un testigo excepcional de las costumbres y modos de vida de la sociedad japonesa del periodo Edo.

A continuación analizamos qué es el ukiyo-e, los tipos de grabados y los artistas más representativos en este género típico japonés, así como su influencia en el mundo occidental.

¿Qué es el ukiyo-e?

El ukiyo-e es una manifestación artística que tuvo su origen en Edo (la actual Tokio). Las obras de ukiyo-e se realizaron en xilografía o grabado en madera. Este arte estuvo influenciado por las escuelas tradicionales chinas y las escuelas de formación artística de la era Tokugawa (1603-1868). Se desarrolló entre el siglo XVII y el siglo XX, aunque el momento de mayor esplendor del ukiyo-e fue a finales del siglo XVIII en las era Tenmei (1791-1789) y Kansei (1789-1801).

En japonés, la palabra ukiyo-e se compone de tres kanji: "uki", que significa flotante; "yo", que se traduce como mundo y "e", que se utiliza para pintura. La traducción sería “pinturas del mundo flotante”. El término procede del budismo y, en su origen, se utilizaba para referirse de forma peyorativa al mundo ilusorio y efímero que es necesario trascender para alcanzar el conocimiento. La nueva clase social surgida con la decadencia y caída del shogunato y ascenso del poder imperial se sintió más atraída por la diversión que por la sabiduría. Así, el ukiyo-e describía el estilo de vida urbano contemporáneo que se centraba en experiencias efímeras que enfatizaban el ingenio, la extravagancia y el hedonismo.

El ukiyo-e está muy vinculado al crecimiento de las ciudades. Mientras que el shogunato Tokugawa logró establecer la paz y controlar a los señores “feudales” o daimyo, la formula empleada de “asistencia alternada” que obligaba a la presencia física del daimyo en sus territorios. Este sistema redujo el poder adquisitivo de estos señores feudales y favoreció, por un lado, el crecimiento de las ciudades, ya que tenían la obligación de embellecer sus residencias (también las de la ciudad) y, por otra parte, se trasladaban con su séquito de samuráis y sirvientes lo que daba lugar a la necesidad de viviendas, almacenes, pero también había que proporcionar divertimentos populares, por lo que se empezaron a crear los barrios de placer donde tenían lugar combates de sumo, ceremonias de té y el funciones de teatro kabuki.

La técnica del ukiyo-e

El precursor del ukiyo-e fue Hishikawa Moronobu. En sus comienzos artísticos, dibujaba grabados en tinta negra como ilustraciones para libros. Progresivamente perfeccionó esta técnica en grabados de madera de una sola pieza en tinta negra lo que resultó en la colocación de la base para el futuro desarrollo de ukiyo-e.

Amantes al lado de las hierbas florecientes de otoño (1680), de Hishikawa Moronobu. Se considera a Moronobu el precursor del ukiyo-e. Destacan en sus obras sus sinuosas líneas negras y sus imágenes emotivas, en especial por sus representaciones de amantes en actitudes cariñosas. 

Los primeros trabajos de ukiyo-e fueron composiciones sencillas  realizadas en blanco y negro, coloreadas a mano bajo demanda y realizadas a mano con un pincel. La impresión a color no se popularizó hasta la segunda mitad del siglo XVIII, De la misma manera, con la difusión del ukiyo-e, la cadena de trabajo se fue ampliando. En el proceso, además del dibujante, intervenía el artesano, que grababa la madera, el impresor y, sobretodo el editor que se encargaba de la comercialización del trabajo y era el mayor beneficiario económico en la cadena.

Los primeros artistas de ukiyo-e retrataron mujeres hermosas, actores del teatro kabuki, cortesanos, flora y fauna. Estos primeros trabajos se comercializaban a precio bajo y fueron accesibles a las clases comerciantes emergentes, lo que, a su vez, desembocó en la divulgación del género. Artistas posteriores, expandieron el género para incluir temas no tradicionales como historia, cuentos populares y famosos paisajes, según los gustos de la clase media de la época. Los trabajos de los autores del ukiyo-e reflejan el deseo de preservar las tradiciones, pero también la necesidad de innovación en una nueva era.

El arte ukiyo-e  giró en torno al ideal de buen gusto de la clase mercantil y del concepto iki, término que significa vida, pero que connota elegancia, sensualidad y sofisticación tanto en el aspecto físico como en el comportamiento cotidiano.

Tipos de grabados ukiyo-e

- Bijin-ga o grabados de mujeres hermosas que respondían al ideal de belleza. Generalmente, las modelos eran trabajadoras de alto rango de barrios de placer, como el Yoshiwara en Edo. El tema fue, sin duda, el más popular en la época y los artistas más relevantes fueron Utamaro,  Kiyonaga y Harunobu.

Geisha esperando una noche de lluvia de Kitagawa Utamaro (Japón ca. 1754-1806). Este grabado ukiyo-e pertenece al género bijin-ga y refleja el ideal de belleza femenino de la época.


- Mushae o grabados de samuráis. En los inicios de este subgénero del ukiyo-e, los temas se inspiran en los héroes de la literatura clásica japonesa. Al final del periodo del Shogunato Tokugawa, los mushae sufrieron censura y era difícil publicarlos. No obstante, en la época Meiji con la creciente militarización del país, los grabados de temática mushae resurgieron. Destacan autores como Kuniyoshi, Kunisada e incluso el propio Hiroshige, quien realizó algún grabado de esta temática, y posteriormente destacan los trabajos del artista Yositoshi Tsukioka.

-Yakushae o grabados de actores del teatro kabuki, que se convirtió en uno de los divertimentos favoritos en Edo. Destacan por sus trabajos en este estilo: Katsukawa Shunsho, Torii Kiyomitsu, Toshusai Saharaku o Utagawa Kunisada. 

- Sumoe o grabados de luchadores de sumo. La lucha de sumo se convirtió en deporte profesional al principio del periodo Edo y pronto se convirtió en una de las actividades favoritas en las zonas urbanas. Los artistas plasmaban a los luchadores de sumo en el cuadrilátero, pero también en otras actitudes más cotidianas. Destacan los trabajos de Utamaro o Toyokuni.

Luchadores de sumo antiguo ukiyo e tradicional

 Los luchadores de sumo Takaneyama Yoichiemon y Sendagawa Kichigorō, de Katsushika Hokusai (Tokyo 1760-1849). Esta imagen refleja el gusto por la sociedad japonesa del periodo Edo por el sumo como divertimento.


- Fukei-ga o grabados de paisajes. Con el cambio político y social que se produjo en Japón, se empezaron a popularizar, especialmente en el S. XIX, los viajes buscando la belleza del lugar. De hecho, se puede decir que Hokusai con sus Treinta y seis vistas del monte Fuji fue pionero en este subgénero que se popularizó, e incluso se imitó en Europa.

- Shun-ga o grabados eróticos. La traducción literal del término shun-ga es “imágenes de primavera”. ya que la primavera se utiliza como eufemismo para denominar al acto sexual.. Este tipo de arte alcanzó mucha popularidad ya que eran muy lucrativos. Describían relaciones sexuales de todo tipo y que reflejaban a todos los miembros de la sociedad.

Algunos de los artistas más relevantes, y también conocidos en occidente del ukiyo-e, son: Hiroshige, especialmente por el tratamiento que hace de a figura de la mujer; Hokusai, que destaca en el tratamiento de los colores en sus paisajes; Kuniyoshi, por los temas que refleja en su obra; Utamaro, de quien son muy populares sus grabados del género shunga y Sharaku, el gran retratista de los actores kabuki de su época.

La influencia del ukiyo-e en occidente

La gran ola de Kanagawa (ca. 1830-1832), de Katsushika Hokusai. Este grabado se ha convertido en todo un icono de Japón en la sociedad occidental y ha trascendido las fronteras japonesas para dar a conocer la dimensión del grabado japonés en la sociedad Edo.

Con la apertura de Japón en la era Meiji, el ukiyo-e se difundió en occidente en el siglo XIX a través de las nuevas relaciones comerciales con Japón, las exposiciones universales y la divulgación de los relatos de los viajeros. El gusto en occidente, sobre todo por las clases burguesas, por la simplicidad y la elegancia del arte oriental dio lugar al japonismo, en referencia a la influencia nipona en el arte de la época. Especialmente, fueron los artistas impresionistas, postimpresionistas y modernistas quienes recibieron más influencia del ukiyo-e: copiaron el tratamiento de la luz en los paisajes e incluso en las temáticas elegidas por los autores japoneses. Esta influencia no solo se ha manifestado en la pintura, sino también en otros ámbitos gráficos como el diseño. En nuestros días todavía se utiliza el ukiyo-e como fuente de inspiración en todo tipo de artes. Véase como ejemplo las colecciones de alta costura de Givenchy o McQueen, o los carteles creados al puro estilo Ukiyo-e de la saga Star Wars. 

BIBLIOGRAFÍA

Almazán Tomás, V. David (2013). El grabado ukiyo-e como reflejo de los valores de la cultura japonesa. Japón: identidad e identidades. Publicado en “Kokoro: Revista para la difusión de la cultura japonesa”. Número 1. 

Guerrero Andrade, Lourdes (2019). Estampas del mundo flotante: ukiyo-e o xilografía ukiyo-e. Publicado en “Amontonamos las palabras. Blog de la Biblioteca del Colegio de México”.

Guth, Christine (1996). El arte en el Japón Edo. Madrid: Akal

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